sábado, marzo 05, 2011

Dos proyectos presentados en el Indesol en 2011.





Este año presentamos dos proyectos a concurso en el Instituto Nacional de Desarrollo Social, uno en que proponemos cinco acciones hacia la sustentabilidad en una comunidad con un enfoque integral y otro para de talleres en el uso de las maderas nativas en dos comunidades, ambas en la Sierra de Tamaulipas. El primero consiste en:
  1. El establecimiento de una plantación de chile piquín bajo un sistema agroforestal en dos hectáreas de bosque en la rivera norte del arroyo Los Ángeles con un sistema de riego por goteo.
  2. Mejoramiento de sus prácticas agrícolas en las pequeñas superficies de cultivo con las que cuenta la comunidad y en las que siembran maíz y frijol criollos para autoconsumo con el uso de la rotocultivadora.
  3. Como es una comunidad que depende en sus ingresos de sus recursos forestales, con autorizaciones para hacerlo, que comercializan como postería y carbón con muy bajos ingresos, un aserradero pequeño les permitiría vender su madera de ébano, chicharrilla , malva y rajador o usarla para fabricar muebles y objetos, como les hemos capacitado en los talleres que impartimos.
  4. El mejoramiento de sus viviendas y su salud con la fabricación de adobe en la comunidad con una máquina adobera tipo CINVA-RAM.
  5. Y por último el establecimiento de una biblioteca comunitaria de temas agropecuarios, ambientales, desarrollo sustentable y salud.
Con estas cinco acciones mejoramos en forma clara y mensurable sus niveles de bienestar e iniciamos un proceso que les llevaría en caso de ser aprobado a ser una comunidad modelo de sostenibilidad.


El segundo es como el que realizamos en el 2009 pero en otra dos comunidades: Instruirlos en el uso de sus maderas nativas, para que dejen de producir carbón con especies de gran valor como el ébano, la chicharrilla, la malva, etc y dotarles de herramientas manuales que no necesitan electricidad, con la que no cuentan. Estas dos nuevas comunidades están enclavadas en el corazón de la Sierra de Tamaulipas, a más de cincuenta km de la caretera y que por su aislamiento, falta de empleos y servicios, se han ido despoblando.